viernes, 5 de agosto de 2016

La felicidad



¿Qué es la felicidad y que es la infelicidad? Dicen que son dos emociones efímeras,  que la segunda dura más que la primera, aun así todas las personas quieren ser felices, incluso a pesar de la primera premisa, en la cual señalamos que la felicidad es más corta que la infelicidad. Si todas las personas quieren ser felices y no saben, entonces cómo es importante señalarles el punto de partida.

La autoaceptación es el reconocimiento y la aprobación de uno mismo, es sentirse conectado en cuerpo, alma y espíritu. Autoaceptación no implica que una persona no quiera mejorar en ciertos aspectos, ciertamente puede aceptarse a sí mismo y continuar mejorando, entendiendo que puede ser alguien más y seguir avanzando, es el tránsito diario hasta alcanzar el ideal de nuestra visión personal respecto a quienes somos.

La aceptación de la orientación sexual es fundamental para alcanzar la felicidad, ello no implica realizar un comunicado formal, publicar en facebook tus preferencias tomar una bandera arcoíris para sentirse autoaceptado. Elllo es un error frecuente en diversos grupos sociales, la autoaceptación es un proceso estrictamente personal que conlleva a la felicidad y a la paz interior. Pero ¿qué sucede cuando la sociedad no contribuye a que este proceso personal e individual fluya de manera natural? Sucede que las personas que sufren la presión social para no aceptarse son más cercanas a la infelicidad, y la infelicidad no es individual, la infelicidad tiende a generar espacios de conflicto, problemas laborales, familiares, sentimentales y tienen un gran impacto en todo el entorno de la persona que, por diversos motivos no se acepta a sí misma, por eso es importante que la sociedad haga un alto y se pregunte a si misma que derecho tiene de no permitir la felicidad de una persona, ¿qué derecho tiene para bloquear un proceso natural e individual del crecimiento de un ser humano?, ¿qué derecho tiene para frenar la necesidad de autoaceptación de un individuo que, como ellos, aspira a la felicidad?, ¿qué derecho tiene de hacer que una persona se sienta menos valiosa, menos apreciada, menos querida, menos aceptada que el resto?

La orientación sexual es solo una de las variantes de una serie de aspectos impuestos por la sociedad que hacen que las personas no se acepten, un país que solo cuenta con información basada en mitos y en supuestos tiende a tener una percepción errada o segmentada, imposiciones que van desde la contextura física, el color de piel, la posición económica, el lugar de procedencia entre otros tantos aspectos, pero quizá sea la orientación sexual la que se sufre más porque va en silencio y generalmente no existe el apoyo del entorno inmediato, las familias generalmente son las primeras en aislar a un individuo haciéndolo sentir malo, sucio y equivocado.

Por eso es importante pensar en nuestra felicidad y contribuir a la felicidad del resto, dejar que cada persona fluya en sí misma, se acepte y se quiera, puede que su forma de ser, de vivir o de pensar sea distinta, pero ello no traza una diferencia justificada para condenar a alguien a la soledad, a la infelicidad, a no tener patrimonio común o descendencia, un mundo más justo es un mundo más pacífico, un mundo más igual es un mundo más feliz.

Y tú ¿Quieres un mundo más feliz? Entonces contribuye a la felicidad del resto, permite la autoaceptación, incluye a quien fue aislado, cambia paradigmas sociales, y consagra el derecho de igualdad para todos. Felicidad también es ver felices a los demás.

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